Un estudio reciente de Arival, revela una brecha de riqueza cada vez mayor en el sector de las experiencias; Los viajeros adinerados, especialmente los jóvenes, están gastando significativamente más, mientras que los viajeros de ingresos medios están reduciéndolos. Esta tendencia, destacada en el último informe Affluent Traveler de Arival, subraya la creciente disparidad en el gasto en viajes y señala un posible cambio a largo plazo en la dinámica de la industria.
Las implicaciones de esta creciente brecha podrían ser significativas para el sector de las experiencias. El informe plantea la cuestión de si se trata de una tendencia cíclica, o algo más, que insinúa la posibilidad de un cambio fundamental en el panorama de los viajes con consecuencias duraderas.
A medida que los viajeros de ingresos medios reducen sus gastos, la industria puede depender cada vez más de una base de clientes más pequeña y adinerada. Esto podría requerir un cambio estratégico para muchos operadores, adaptando sus ofertas para satisfacer las preferencias y expectativas únicas de las personas de alto poder adquisitivo.
Principales conclusiones del informe:
Impacto de los más jóvenes y ricos: El grupo demográfico más joven y afluente (de 18 a 44 años) representa dos tercios de todos los viajeros afluentes e impulsa una proporción aún mayor de reservas y gastos, especialmente en actividades.
Disparidad en el gasto: Los viajeros más jóvenes y adinerados gastan significativamente más en cada viaje (casi 5.000 dólares) en comparación con los viajeros de ingresos medios y bajos, que gastan un promedio de 3.597 y 2.305 dólares, respectivamente.
Los viajeros de ingresos medios, que alguna vez fueron la columna vertebral de la industria, han reducido significativamente sus gastos, tal vez reflejando presiones económicas más amplias y una clase media en contracción. El informe de Arival revela que los hogares de ingresos medios ahora representan el 51% de los viajeros, frente al 58% en 2019.
Aumento del gasto de los afluentes: Los viajeros con ingresos familiares anuales de $150,000 o más han aumentado drásticamente su participación en el gasto en tours, actividades y atracciones, y ahora representan casi la mitad (46%) del mercado. En particular, representan solo una quinta parte de todas las experiencias de los viajeros, pero representan casi un tercio de todas las reservas.
Implicaciones de la industria: La creciente brecha de riqueza plantea desafíos y oportunidades para el sector de las experiencias, lo que podría requerir un cambio hacia la atención de las preferencias de los viajeros adinerados.
"El cambio en la demografía de los viajeros, el aumento del viajero adinerado y el retroceso de los viajeros de ingresos medios y bajos, puede ser más que el resultado de otro ciclo económico", dijo Douglas Quinby, cofundador y CEO de Arival. "Podría señalar un cambio más grande y fundamental con enormes implicaciones a largo plazo para nuestra industria.
"Los viajes pueden llegar a depender de más y más dólares provenientes de un subconjunto más pequeño de viajeros. Afortunadamente, estos viajeros están especialmente hambrientos de experiencias, sin embargo, sus preferencias pueden diferir de las del viajero general, lo que significa que algunos operadores pueden necesitar adaptar sus ofertas para atraer a estos viajeros. El segmento de viajeros más grande, el viajero de clase media, puede ser cada vez más vulnerable durante las recesiones y más sensible a los precios incluso durante las repuntes".