La Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA), que representa a las grandes navieras en el mundo como Carnival, Royal Caribbean o MSC Cruceros, ha salido esta mañana en defensa de la industria naviera y del injustificado sambenito que se le ha colgado como principal responsable de los movimientos globales de rechazo al turismo. Unas protestas que han sido especialmente visibles en España, donde prendieron a finales de marzo en Canarias, se extendieron posteriormente a Baleares y Málaga y han tenido su último episodio la pasada semana con varios ‘ataques’ con pistolas de agua a turistas en Barcelona.
“Los pasajeros de cruceros solo representan el 2% de los turistas en el mundo. Ese porcentaje baja al 1% en el caso de Ámsterdam y sube al 4% en el de Barcelona”, recalcó durante su intervención Marie-Caroline Laurent, directora general de este organismo en Europa, que no esquivó la responsabilidad de las compañías a las que representa. “Tenemos cosas que hacer para mejorar la gestión del turismo. Estamos dispuestos a conversar con las autoridades locales, como hemos hecho en Palma de Mallorca o Barcelona para mejorar el flujo de pasajeros y minimizar el impacto”, subrayó durante su intervención.
En esa misma línea de defensa, Alfredo Serrano, director general de CLIA en España, confirmó el buen pulso de las ventas de cruceros en España, tanto como emisor y receptor de pasajeros, superando al cierre de 2023 las cifras previas al covid. “En los cinco primeros meses de este año, los pasajeros de cruceros han crecido un 7% en España, según las cifras de Puertos del Estado. Eso representa solo la mitad que el turismo en su conjunto y la previsión al cierre del año es hacerlo un 5% frente al 12% de todas las actividades turísticas”.
Serrano considera que el fuerte crecimiento experimentado en el número de pasajeros de cruceros en España en los dos últimos años obedece a varias razones exógenas. La primera y la más importante, en su opinión, ha sido el conflicto bélico en Ucrania, que ha dejado sin clientes uno de los grandes destinos de cruceros (San Petersburgo) y ha desviado mucho tráfico al Mediterráneo. Posteriormente, la invasión israelí en Gaza ha disparado la inestabilidad en la zona y ha reducido la demanda a Egipto, Turquía u Oriente Medio. En paralelo, la demanda a Asia aún está lejos de los niveles precovid. En último lugar argumentó que las navieras, que planifican sus viajes con dos años de antelación, optaron mayoritariamente a principios de 2021, aún en plena pandemia, por diseñar viajes a destinos de proximidad para esquivar la posible falta de conexión aérea, lo que benefició a España. Ahora recuperada la conectividad por avión, Serrano considera que lo lógico es que haya un trasvase de demanda hacia esos destinos y que el crecimiento en España sea más moderado.
El creciente impacto del turismo en la economía española
Virgina Messina, vicepresidenta senior del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC por sus siglas en inglés), aprovechó su intervención para remarcar el impacto positivo que tiene el turismo en las economías dónde se produce y especialmente en España, el segundo destino más visitado del mundo. "En 2019, el conjunto de actividades ligadas a los viajes y al turismo generaron 200.000 millones de euros en España, un 14,1% del PIB , y 2,8 millones de empleos, lo que supuso uno de cada siete puesto de trabajo. Cuatro años después, el impacto económico ya había superado en un 5% las cifras de 2019 hasta los 212.000 millones de euros, un 14,5% del PIB". Las previsiones de este organismo son aún más optimistas. "Generará 225.000 millones de euros, un 15,2% del PIB, y cerca de tres millones de empleos, un 14% del empleo".
Por Carlos molina Infante para https://cincodias.elpais.com/