La industria de viajes, como muchas otras, se encuentra en medio del entusiasmo y el fervor tecnológico que rodea a la inteligencia artificial. Por ejemplo, Airbnb lo está usando para evitar que los huéspedes golpeen las propiedades de los anfitriones, y Four Seasons lo ha implementado para hacer que su servicio de conserjería sea aún más elegante. El impacto transformador de la IA en el turismo es innegable.
También hay casos en los que la IA está ayudando a que los viajes sean más sostenibles. Sin embargo, hay límites a lo que la IA puede hacer, y delegar nuestra responsabilidad de resolver problemas de sostenibilidad a la IA simplemente no es suficiente.
Para hacer que nuestra industria sea realmente más sostenible, debemos comenzar, como seres humanos, a comportarnos de manera consciente y responsable, y educar a otras personas para que también puedan hacerlo.
Tenemos que profundizar en las capacidades de la IA y determinar si puede ayudar plenamente a la industria a realizar una transición sostenible eficaz o si, en algunos casos, se trata principalmente de una ilusión.

La IA determinó patrones de estacionalidad alta y baja
La IA es capaz de procesar y analizar grandes cantidades de datos, y esto ayuda a implementar soluciones sostenibles en los viajes.
Por ejemplo, nuestro equipo creó un mapa de calor que ilustra la "carga turística" en cada país, destacando los lugares que más visitan nuestros viajeros. La IA nos ayudó a identificar las rutas más populares y a determinar los patrones de alta y baja estacionalidad.
Luego trabajamos con nuestros expertos en viajes para ofrecer paquetes a lugares populares durante la temporada baja y redistribuimos la carga de visitantes para evitar aglomeraciones. Esto fue beneficioso para todos, ya que los clientes también se beneficiaron de precios más bajos y la oportunidad de explorar nuevos lugares.
Hay más que se puede hacer. Un problema importante al que se enfrenta el sector es que los viajeros no saben cómo encontrar opciones de viaje sostenibles. El Informe de Viajes Sostenibles 2022, realizado por Booking.com, revela que el 29% de los viajeros que respondieron se enfrentaron a este problema, y el 31% de los viajeros admitieron que ni siquiera sabían que existían este tipo de propiedades.
Para resolver esto, los asesores de viajes pueden integrar la IA para identificar y promover opciones de viaje sostenibles y operadores turísticos responsables. Se pueden obtener más recomendaciones, y validación, utilizando IA para revisar reseñas en línea, publicaciones en redes sociales y otras fuentes, lo que hace que las opciones de viaje sostenibles sean más visibles para el viajero promedio.

Los turistas nunca instalarán inodoros o contenedores de basura
Los beneficios potenciales de la IA suenan maravillosos, pero para tener éxito debemos mirar más allá del análisis de datos y las visualizaciones y llegar a la raíz del problema.
Consideremos un ejemplo sencillo. Un viajero está haciendo senderismo en el desierto del Sahara, un lugar sin baños ni botes de basura, y deja sus desechos en algún lugar de la ruta. Claro, se puede instalar una cámara de vigilancia impulsada por IA para rastrear a los delincuentes. Pero eso, por sí solo, no resuelve el problema: todavía hay desechos en algún lugar de la ruta y el lugar está siendo contaminado.
Esto demuestra la falta de conciencia y responsabilidad por parte de las personas encargadas de mantener el camino; en este caso, el gobierno. Los turistas nunca instalarán sus propios inodoros o contenedores de basura. Esto debe ser hecho por las autoridades locales. También ilustra el punto principal, que es que estos problemas deben ser resueltos por humanos, no por IA.

Escenario ideal: Humanos y tecnología trabajando juntos
Los algoritmos impulsados por IA son excelentes en ciertas cosas, como optimizar rutas e itinerarios de viaje, aumentar el retorno de la inversión de una campaña de marketing y personalizar ciertas experiencias según las necesidades y preferencias particulares de los viajeros.
Esto significa que la próxima vez que planee admirar la belleza del mar Egeo, su crucero podría estar utilizando un sistema de gestión de energía impulsado por IA para optimizar su consumo de combustible y reducir sus emisiones de carbono.
He aquí otro ejemplo. Las nuevas versiones tanto de Google Maps como de la Búsqueda pueden trazar el camino más respetuoso con el medio ambiente para nuestro viaje, incluyendo la mejor ruta para cargar nuestro vehículo eléctrico o la opción más transitable.
Sin embargo, hay tantos destinos maravillosos en todo el mundo que todavía dependen del trabajo manual local y las actividades comunitarias que están fuera de lo común. Digamos que estás visitando la ruta del café en Colombia. La mayoría de las actividades en las que te sumergirás, como conectarte con los agricultores locales y recoger tus propios granos de café, son operadas por lugareños, y es posible que la IA no tenga información sobre estas gemas por descubrir.
Claro, las soluciones tecnológicas podrían ser excelentes para ayudar a estas organizaciones de base a llegar a más visitantes, hacer que sus operaciones sean más eficientes, etc., pero el toque humano sigue siendo necesario. Para que estas experiencias sucedan, los asesores de viajes deben trabajar junto con los operadores locales, asegurando que la tecnología mejore en lugar de reemplazar las experiencias enriquecedoras que definen el turismo simbiótico.
Hay más beneficios en este enfoque. Integrar a los viajeros en el tejido de la cultura y el patrimonio locales cultiva un aprecio más profundo por los destinos a los que viajan. Esto hace que cuiden mejor el lugar e inculquen un sentido de responsabilidad, algo muy necesario para los viajes sostenibles.

Garantizar una distribución justa de los beneficios y el alcance de los ingresos locales
No hay duda de que la IA tiene capacidades impresionantes y que puede ayudar a la industria del turismo a ser más sostenible.
Sin embargo, por sí solos, no son suficientes. Para ayudar realmente a que el sector de los viajes evolucione, se requiere el toque humano, así como los esfuerzos colectivos de individuos, comunidades y gobiernos.
Como partes interesadas del sector de los viajes, debemos ser proactivos a la hora de garantizar que los beneficios se distribuyan de forma justa y que los ingresos puedan llegar a las comunidades locales. También tenemos que educar a los viajeros e inculcarles un sentido de responsabilidad, empezando por ayudarles a sumergirse en cualquier comunidad que visiten y conectándolos con los lugareños.
Al asumir nuestra responsabilidad de hacer que los viajes sean sostenibles, podemos preservar las maravillas del mundo y garantizar que las generaciones futuras puedan disfrutarlas.

Por Olga Bortnikova, cofundadora de la startup de tecnología de viajes Tripsider, que conecta a los usuarios con creadores de viajes para crear recorridos personalizados.

Fuente News on Travel Technology, Distribution and the Digital Economy | PhocusWire