"Menys Turisme, Més Vida" ha pasado de ser un eslogan de protesta contra el exceso de turismo en Mallorca al nombre de una nueva asociación. El viernes, esta asociación celebró una importante reunión en Sineu, con el objetivo de debatir estrategias para mitigar la masificación y planificar acciones de protesta.
Protestas y propuestas
El sentimiento en el salón de actos del instituto de Sineu era claro: "Va a ser un verano intenso". El foco principal de las protestas es el aeropuerto de Palma Son Sant Joan, con discusiones sobre la posibilidad de paralizar el aeropuerto. Dadas las complicaciones jurídicas que podrían entrañar esas protestas, se sugirió que se estableciera un fondo de resistencia para cubrir las multas que pudieran surgir.
Llamados a la acción colectiva
Respuesta social compartida: El activista climático Pere Joan Femenia hizo hincapié en la necesidad de una respuesta social unificada al exceso de turismo, que resuene en la sociedad en general.
Fuerza colectiva: Margalida Ramis, presidenta del grupo ambientalista GOB, destacó la importancia de la fuerza colectiva para lograr soluciones inmediatas, de mediano y largo plazo.
Propuestas clave:
Limitar el número de coches de alquiler.
Uniendo a varios sindicatos para impulsar el movimiento.
Contexto político
Ramis señaló la necesidad de hacer cambios durante el actual período de gobierno, expresando su escepticismo sobre confiar en un posible cambio futuro en el liderazgo político. Esta crítica se dirigió a la coalición de izquierda por su aparente inacción en el tema del hacinamiento.
Demostraciones planificadas
Se está planeando una manifestación "masiva", aunque aún no se ha fijado una fecha.
Para el sábado 25 de mayo está prevista una protesta en Palma, organizada por el colectivo Sencelles Banc del Temps.
La asociación "Menys Turisme, Més Vida" se prepara para un verano de intensa actividad con el objetivo de abordar los retos del turismo excesivo en Mallorca. A través de protestas estratégicas, acciones colectivas y propuestas específicas, el grupo busca aliviar las presiones del hacinamiento y promover un enfoque sostenible del turismo que equilibre las necesidades tanto de los residentes como de los visitantes.