Las pinturas rupestres de la Cueva de las Manos en el Cañadón del Río Pinturas en Santa Cruz, es una de las mayores expresiones artísticas y culturales de los primeros pobladores del continente americano, y un tesoro que todavía debemos descubrir.
En nuestro país se encuentra una cueva tan maravillosa como la de Altamira, está en la provincia de Santa Cruz y se la conoce como la Cueva de las Manos
Los antiguos pobladores de la Patagonia no conocían la escritura pero igualmente nos dejaron testimonio del paso por estas tierras en forma de dibujos sobre roca. El arte rupestre en otros continentes ha atraído por cientos de años a visitantes que se maravillan ante las muestras de formas y colores de miles años de antigüedad.
Nuestro país también es rico en estas muestras de arte y tal vez una de las mejores expresiones se encuentre en el lejano sur, en el cañadón del río Pinturas en Santa Cruz.
El entorno
La naturaleza es muy generosa en Santa Cruz, costas recortadas con un mar azul lleno de vida animal, un interior de mesetas que albergan millones de ovejas, ríos que son la meca de pescadores de todo el mundo en busca de sus truchas, lagos de maravillosos colores, glaciares y montañas eternamente nevadas, aunque posee un clima difícil de sobrellevar debido al frío y al viento.
En este entorno está ubicada la ciudad de Perito Moreno, punto de partida para visitar la Cueva de las Manos, al este del inmenso Lago Buenos Aires y a 386 kilómetros de Comodoro Rivadavia (Chubut). Allí hay establecimientos ganaderos y chacras que cultivan frutas finas como frutillas, cerezas y frambuesas.
Desde Perito Moreno se puede acceder a las estancias turísticas (La Serena, Telken, María Aike, Los Toldos, Complejo Lagos del Furioso, La Oriental, Menelik, Alma Gaucha, El Bagual, Laguna Verde y La Angostura) que ofrecen excursiones guiadas a los principales atractivos del área como el Parque Nacional Perito Moreno, el Cañadón del Río Pinturas, el cerro San Lorenzo y los lagos Pueyrredón y Posadas -ideales para la pesca deportiva.
La llegada
Dada la ubicación, las distancias y el estado de las rutas lo realmente complicado es llegar. Desde Comodoro Rivadavia (más cercana al destino que la misma capital santacruceña, Río Gallegos), sobre la costa atlántica, se puede alquilar un auto o tomar un ómnibus de línea regular para llegar hasta la ciudad de Perito Moreno, siempre por ruta asfaltada.
Otra opción es hacer en automóvil los 1900 kilómetros que separan a Buenos Aires de Caleta Olivia, por la Ruta Nacional 3 y desde allí tomar la ruta provincial 43 hasta Perito Moreno. La tercera opción, tal vez la más aventurera, es llegar por la Ruta Nacional 40, la única ruta que conecta a todo lo largo la zona oeste de nuestro país. El vehículo más apropiado para enfrentar el ripio y las malas condiciones de muchos de sus tramos debe ser, preferentemente, un todo terreno. Claro que allí no termina la expedición. Saliendo desde Perito Moreno hacia el sur hay que recorrer unas dos horas por la 40 (120 kms) en un tramo íntegramente de ripio y conectar con la ruta 97 para hacer 46 kilómetros más.
Una vez allí se dará cuenta que la dureza del viaje bien valió la pena.
El cañadón
El Río Pinturas, que debe su nombre a la palabra aborigen kolon niyeu, que significa tierra de colores, y no de las pinturas rupestres que alberga, nace de aguas de manantiales y del deshielo del Monte Zeballos en la gran meseta del Lago Buenos Aires. La solitaria estepa patagónica lo ve correr hasta la profunda falla geológica que se formó durante miles de años por la acción de un antiguo glaciar que ocupaba el actual valle de los lagos Pueyrredón y Posadas (para ubicarse con una imagen más que conocida piense en el famoso Cañón del río Colorado, aunque no en sus dimensiones, ya que aquel es muchísimo más grande).
Con la única compañía del viento, algunos pumas y cóndores las paredes de 170 metros de profundidad del cañadón dan abrigo a cavernas y aleros que fueron usados como refugio de los antiguos pobladores patagónicos.
Toda esta zona y no sólo la Cueva, incluido el Parque Nacional Perito Moreno (no confundir con el Parque Nacional los Glaciares, con el Glaciar Perito Moreno) es un riquísimo sitio arqueológico y paleontológico. Los valles, cañadones, lagos y ríos guardan celosamente pinturas rupestres y yacimientos arqueológicos de los hombres que dejaron sus huellas 14.000 años antes de Cristo.
Cueva de las Manos
La Cueva de las Manos fue ocupada hace once mil años en forma esporádica por grupos seminómadas que vivían de la caza y la recolección. Su principal alimento fue el guanaco y por esta razón es quizás el animal más representado en su arte. Se cree que con el tiempo estos refugios pasaron a ser un espacio ritual, un verdadero santuario. Mientras que sus campamentos de viviendas se ubicaban en el fondo del valle, cerca del río, y cazaban en las pampas altas que lo rodean.
La cueva tiene 24 metros de profundidad, 15 metros de ancho en la entrada y alrededor de 10 metros de altura en la entrada con 2 metros de alto en el interior. Los aleros están formados por salientes rocosas que protegen las pinturas del viento y del sol. Los paredones prácticamente verticales fueron pintados hasta los 3 y 4 metros de altura. Debe su nombre a las 829 imágenes de manos humanas (casi todas izquierdas, solo hay 31 manos derechas dibujadas) junto a escenas de caza y dibujos geométricos en vivos colores rojo, ocre, violáceos, negro y amarillo que fueron pintadas entre el 7300 ACy el 1000 de nuestra era.
Los estudios distinguen tres estilos o momentos. El más antiguo, 9500 años, está representado por negativos de manos (es decir el contorno logrado cuando se sopla pintura sobre la mano apoyada en la pared), escenas de caza y manadas de guanacos. Los dibujos nos muestran movimiento y dinamismo y los colores que más vemos son el negro, el ocre, el amarillo, el rojo claro y el verde.
El segundo grupo,7000 a 3000 años atrás, está representado también por manos negativas, grupos de guanacos hembras preñadas, algunos anfibios y ñandúes y aparecen figuras felinas. Acá predominan los dibujos en tonos de rojo y aparece el color blanco.
El último grupo, de 2500 años, es el menos numeroso en la cueva y de menor calidad artística. Está representado por una serie de dibujos enigmáticos: figuras humanas, manos esquemáticas, figuras geométricas, círculos concéntricos, líneas en zigzag, todas en un rojo vibrante.
Después de esa época se abandonó la costumbre de pintar en las paredes del cañadón, los tehuelches ya no habitaban ni transitaban la zona del Río Pinturas que consideraban según sus tradiciones como el "País del Diablo".
En diciembre de 1999 la Cueva fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco ya que este sitio “encarna la prueba de la más antigua expresión de los pueblos sudamericanos”. La UNESCO destacó la importancia de Cueva de las Manos como un “conjunto pictórico único en el mundo” por su antigüedad y continuidad a través del tiempo, la belleza y estado de conservación de las pinturas, la magnificencia de los conjuntos de negativos de manos y de escenas de caza y por el escenario que rodea al sitio de una “belleza emocionante” y por “formar parte del valor cultural del sitio en sí mismo”.
La visita al sitio
Todos quienes llegan deben recorrer los aleros acompañados de un Guía de Sitio, visitas que se realizan por orden de llegada y parten del Centro de Interpretación cada hora desde las 9 de la mañana hasta las 19 horas (en verano) mientras que en invierno, por las condiciones de la luz solar ya que anoche muy temprano, los horarios de las visitas son desde las 10 a las 16 horas todos los días.
Los cuidados
- No traspasar las rejas de protección;
- No rayar las paredes con pinturas ni escribir leyendas;
- No encender fuego en las cercanías del sitio;
- Cuidar la prolijidad del sitio y su entorno;
- No dejar basura de ningún tipo;
- No acampar en el sitio ni en las cercanías del mismo;
- No salir de la senda establecida;
- Respetar a los lugareños y cuidadores;
- Respetar la fauna y la flora;
Actividades
En la zona hay muchas posibilidades de realizar trekking en el Parque Nacional P. Moreno (310 kms) en caminatas cortas de medio día al Cerro León, a la Laguna del Mie o Laguna Robles o un poco más exigentes, con por lo menos un día de caminata, como Lago Burmeister, El Rincón y Lago Volcán.
Desde Los Antiguos (a 60 kms) se accede al Lago Buenos Aires (ideal para la pesca), el Monte Zeballos, Río Jeinimeni abundante en salmones, visitar la zona de chacras para comprar las mejores frutas. En verano cerezas, frambuesas, frutillas y duraznos. Hacia el otoño manzanas y nueces o si no es la época, dulces artesanales de exquisito sabor.