Calculando tener al 90% de su población vacunada para noviembre, las autoridades informaron que la apertura gradual será a partir del 15 de noviembre cuando se retomará la actividad turística incluyendo las excursiones, tours y recorridos en el territorio nacional.
Hasta esa fecha se mantienen los requisitos de entrada al país vigentes. Si bien se flexibilizan los protocolos de entrada al país, los implementados en el sector turístico se refuerzan y la seguridad adquiere una mayor significación en los
estándares de calidad, con la aplicación del programa “Turismo Más Higiénico y Seguro” en todos los servicios turísticos para la protección de los trabajadores en contacto con los clientes, de manera de prevenir y cortar cualquier posible cadena de contagio a la población.
Para ingresar a Cuba se mostrará el certificado o documento que acredite el esquema de vacunación internacional de los viajeros y aquellos no vacunados deberán presentar el resultado negativo de un test PCR con fecha máxima de 72
horas antes de su llegada.
Se mantendrá el control de la temperatura de los pasajeros en los puntos de entrada (aeropuerto, marinas, etc.) y se realizarán exámenes aleatorios independientes según el criterio de las autoridades sanitarias (test PCR o antígenos). En el caso de que un cliente resulte positivo, los protocolos definen que se traslada a un hotel-hospital: instalación turística habilitada para el aislamiento y la atención médica.
Según dijo el ministro de Turismo, Juan Carlos García Granda, otras prioridades para las próximas semanas radican en la captación de fuerza de trabajo y la búsqueda de insumos. “No podemos esperar al 15 de noviembre para abrirlo todo, sino que iremos poco a poco en un proceso de desescalada”.
Para ello, mencionó el ejemplo de Varadero, llamado a brindar un servicio con apego estricto a los protocolos sanitarios sin disminuir los estándares de calidad. Allí se comenzará primero a brindar servicios a clientes procedentes de la propia provincia de Matanzas en una fecha próxima. Así se hará en otros territorios cuando la situación epidemiológica lo permita.
De igual modo, destacó la necesidad no solo de generar ingresos, sino de que los hoteles se conviertan en una fuente activa de servicios a la población.
“Queremos lanzar al país no solo como un destino de Sol y playa, sino lograr que la motivación de viajar a Cuba tenga un componente cultural. Para ello ya trabajamos con otros ministerios que nos puedes aportar mucho en ese propósito”.
Finalmente, el titular del turismo confirmó la celebración en el país del Congreso Internacional de Coctelería y de la IV Cumbre Iberoamericana de Turismo Accesible, dos eventos que demuestran la confianza de las instalaciones cubanas. Sobre ellas, destacó el propósito de sostener un destino seguro, sin drogas y sin crimen organizado.
Cubana de Aviación comenzará sus operaciones directas a La Habana semanalmente a partir del 22 de noviembre y a partir de enero retomará su itinerario de Cayo Coco / La Habana.
Se ha eliminado la restricción de equipaje en los destinos Varadero y Jardines del Rey, y no se aplicará en ningún punto de entrada. Se mantiene vigente hasta el 31 de diciembre que los pasajeros tanto cubanos como extranjeros, residentes o no en el país que arriben a Cuba, puedan importar alimentos, aseos y medicamentos como equipaje acompañado, sin límites en su valor y sin pagar los aranceles de Aduana establecidos, ajustándose a las regulaciones de cada línea aérea.
Se han realizado obras para la renovación de la planta hotelera y los procesos de mantenimiento. Se incorporan 4 mil 890 nuevas habitaciones que potencian las modernas tecnologías, respeto al medio ambiente y facilidades de accesibilidad.
Se introducen mejoras en la infraestructura turística para el acceso a Internet en el destino: