Con un almuerzo de prensa en el Casal de Cataluña en la Ciudad de Buenos Aires, el Director del Centro de Promoción Turística de Cataluña para Sudamérica, Jordi Solé i Pérez, presentó el nuevo Plan de Marketing Turístico de Cataluña 2025-2029, quien estuvo acompañado por el Consejero de Turismo de la Embajada de España en Argentina, Felipe Formariz Pombo.
Fue Felipe Formariz el que dio inicio a la jornada comentando que la estrategia del turismo catalán se enmarca dentro de los lineamientos generales de promoción de los destinos españoles y que busca ampliar la mirada más allá de Barcelona, ciudad de entrada natural de miles de argentinos gracias a los vuelos directos de LEVEL.
El Consejero explicó que el objetivo, tanto de la región autonómica como de todo el país, es incentivar a los viajeros a explorar las otras tres capitales de Cataluña —Girona, Lleida y Tarragona—, conectadas por trenes de alta velocidad con toda España.
Nuevo Plan de Marketing
Jordi Solé les refirió a los medios presentes acerca de la Agencia Catalana de Turismo, una institución del gobierno autonómico con sede en Barcelona, y que se encarga de la promoción turística del destino más allá de las fronteras nacionales.
Específicamente la oficina para América del Sur se ubica en la ciudad brasileña de San Pablo, desde donde trabajan los mercados de Argentina, Brasil y Colombia como mercados estratégicos.
“Nuestro objetivo es mostrar la riqueza y diversidad del territorio. Cataluña es una región pequeña, pero con una variedad enorme de paisajes, culturas y experiencias. Queremos ir más allá de Barcelona, descentralizar el turismo y desestacionalizarlo para distribuir los flujos durante todo el año”, dijo el funcionario.
El nuevo Plan de Marketing Turístico 2025–2029 se estructura sobre 8 puntos y 3 grandes líneas de trabajo: la gestión sostenible del flujo turístico, el impacto económico local y el posicionamiento de producto y marca.
En materia de sostenibilidad, se promueve la limitación de la estacionalidad mediante campañas segmentadas y desarrollo de productos adaptados a distintas épocas del año, buscando prolongar la estadía media del visitante. Además, se impulsa la distribución territorial de los flujos turísticos para descentralizar la demanda de Barcelona y potenciar destinos del interior, los Pirineos y el Delta del Ebro.
La estrategia también incorpora el liderazgo ambiental y social como valor central. Se prioriza el apoyo a la economía local, la movilidad de bajo impacto y la preservación de los ecosistemas naturales y del patrimonio cultural.
En el plano económico, el enfoque se orienta a maximizar el beneficio para las comunidades locales. Más allá del número de visitantes, se busca aumentar el gasto de calidad y promover el consumo de bienes y servicios locales. Asimismo, el plan integra la satisfacción de los residentes como indicador clave, fomentando la convivencia y el respeto entre los habitantes permanentes y los turistas.
Otro de los objetivos es fortalecer la fidelización de visitantes recurrentes, mediante acciones de marketing personalizado que alineen los valores del destino con los intereses de los viajeros de alto valor.
Es importante el hecho que desde Cataluña tienen muy en claro que para contrarrestar los efectos negativos de la masificación turística “El residente pasa a estar en el centro de nuestras acciones buscando un equilibrio entre el visitante y quien vive en el destino, promoviendo prácticas sostenibles y conciencia ambiental”. “No hablamos más de turistas, sino de residentes temporales. Queremos visitantes que comprendan el territorio, que lo vivan como propios, y que generen un impacto positivo en la comunidad”, comentó Solé.
Para contribuir a ello se generan acciones que buscan diversificar los productos turísticos, apuntando muy fuertemente al turismo deportivo (en 2026 tendrán la Ryder Cup de golf en Camiral; una fecha de la Fórmula 1 y el MotoGP; reforzar entre el segmento Premium la estación de esquí en Baqueira Beret; el nuevo Camp Nou del FC Barcelona con capacidad para 100 mil espectadores y tendrán a Barcelona en el ojo del mundo al ser etapa de inicio del Tour de Francia, además de realizar tres etapas dentro de la región).
Como para terminar el 2026 por todo lo alto será el año en que Barcelona sea Capital Mundial de la Arquitectura, coincidiendo con el hito más importante que será la finalización de la Sagrada Familia tras 140 años de obras.
No se deja de lado el valor del turismo cultural (Tarragona y su legado romano; Figueres con el Museo de Dalí y la arquitectura modernista de Gaudí) y la gastronomía, en la que Cataluña se posiciona como Región Mundial de la Gastronomía.

El Grand Tour de Cataluña
Una de las estrategias que vienen desarrollando entre el publico es la promoción del “Grand Tour de Cataluña”, un recorrido pensado en aquellos viajeros que alquilan un vehículo y gustan de internarse en caminos y pueblos menos conocidos. Lo que proponen es un itinerario circular que permite recorrer toda la comunidad a lo largo de cinco grandes tramos temáticos, con posibilidad de realizarlo completo o por etapas.
“La idea recorrer Cataluña a tu ritmo. Es una tierra de distancias cortas y grandes contrastes, donde en pocas horas se puede pasar del Mediterráneo a los Pirineos, de los arrozales del Delta del Ebro a las montañas de Prades, o de los pueblos pesqueros de la Costa Brava a los viñedos del Priorat”, explicó Jordi Solé.
El circuito propone una ruta inspiracional, disponible en su web oficial, que abarca grandes ejes temáticos: naturaleza, cultura, gastronomía, historia y experiencias locales.
mas info: https://act.gencat.cat/es/