Este 3 de febrero el jefe de Estado francés presentó su plan denominado "Nuevo Renacimiento del Louvre". Se trata de un vasto programa de renovación ante el deterioro y la creciente asistencia del museo más visitado del mundo.
La Mona Lisa de Leonardo da Vinci se exhibirá en una nueva "área especial" del Louvre, "accesible de forma independiente del resto del museo y provisto por este motivo de su propio boleto de acceso", anunció el presidente de la República francesa.
Un nuevo espacio para la Mona Lisa
Durante un discurso frente a la obra maestra del pintor italiano, Emmanuel Macron también pidió a la ministra de Cultura, Rachida Dati, que "prepare un precio diferenciado más alto para los visitantes extranjeros de países fuera de la Unión Europea". Este nuevo precio entrará en vigor "el 1 de enero de 2026".
También se anunció la "creación de una nueva gran entrada", para aliviar la congestión en la pirámide de cristal.
Una inversión de al menos 700 millones de euros
El vasto plan de renovación del Museo del Louvre anunciado costará entre 700 y 800 millones de euros a lo largo de una década, de los cuales solo una "parte muy minoritaria" será financiada por el Estado, dijo a los periodistas el séquito del jefe de Estado.
El renovado Louvre tendrá como objetivo unos "doce millones de visitantes al año", frente a los casi nueve de 2024, dijo el presidente.
Para que conste, el presidente del Museo del Louvre, Laurence des Cars, envió una nota alarmista al Ministerio de Cultura a mediados de enero. La causa: la "multiplicación de los daños en espacios a veces muy degradados", la "obsolescencia" de los "equipos técnicos" pero también "preocupantes variaciones de temperatura que ponen en peligro el estado de conservación de las obras".
Des Cars dijo "la idea [era] tener una entrada para el Louvre que te diera acceso a las colecciones y exposiciones permanentes (...) y, si quieres ver la Mona Lisa, será esta entrada más el acceso a la Mona Lisa".
El Presidente de la República había propuesto la implementación de un "boleto de acceso limpio", que permitiera hacer que la Mona Lisa fuera "accesible de manera independiente". Pero el presidente del Louvre quiere que la obra "anime a los visitantes a descubrir el resto del museo", calificándola de "bendición" para el museo.